sábado, 12 de enero de 2008

La historia de amor del siglo. Marta Tikkanen


Pablo G. Bao nos envía el poemario de Marta Tikkanen "La historia de amor del siglo". Lo editó Hiperión, con traducción de Francisco J. Uriz, y actualmente está descatalogado. Aquí os va el prólogo (también de Uriz) y los primeros poemas. Como bien dice Pablo, "es algo acojonante, consigue que las palabras te salten encima, como babosas esquizofrénicas...".


PRÓLOGO

En 1978 se publicó en Finlandia un libro de poemas que iba a convertirse en uno de los grandes éxitos literarios de los últimos años Århundradets kärlekssaga (La historia de amor del siglo), de Märta Tikkanen, autora que ya había alcanzado la fama con su novela Männen kan inte våldtas (Los hombres no pueden ser violados). En pocos años se vendieron más de 80.000 ejemplares. Probablemente lo que más llegó a los lectores fue el tono de confesión personal, el hecho de ser, en realidad, una novela contada en poemas sencillos.

El tema central del poemario, como en toda la obra de la Tikkanen, es la relación entre seres humanos. En este caso la de hombres y mujeres o, más concretamente, la de un hombre y una mujer, la de una pareja. Es la historia de sus integrantes que, a pesar de que se quieren, viven en mundos separados, hablan idiomas diferentes, tienen distintas visiones de la mayoría de las cosas. Es la narración de las dificultades de los protagonistas en su búsqueda de esa comunidad que ansiamos todos pero no sabemos cómo alcanzar. En este caso el amor está obstaculizado por algo –la bebida– que se interpone entre los enamorados absorbiendo una parte importante de la vida de uno de ellos. El libro está dividido en tres partes: la primera recoge los problemas cotidianos que el alcoholismo del marido causa a la familia; la segunda, la más importante, es la historia del amor, y la tercera relata el apoyo, la comprensión y el consuelo que recibe la protagonista de otras mujeres, lo que la lleva a tomar conciencia de su identidad, de que ella es un ser humano con vida propia. Es como el último SOS, el último intento de llegar a comunicarse con el otro: ¡Mírame, soy un ser humano! ¡Yo existo, los hijos también! ¡Míranos al menos una vez! ¡No somos más importantes que tú, pero sí tan importantes! ¡Escúchame!

La adaptación teatral del libro se ha representado en numerosos escenarios de Finlandia y Suecia. Traducido al alemán también se ha representado en Alemania, Suiza y Austria. Stina Ekblad, una de las actrices favoritas de Ingmar Bergman, hizo una memorable interpretación para la televisión.

En 1984, para la versión que su marido acabó de ilustrar poco antes de su muerte, la autora escribió el siguiente epílogo:

"Escribí La historia de amor del siglo entre las Navidades de 1975 y el final del otoño de 1977.

Escribía los poemas exclusivamente para mí. Siempre ha sido ésa mi manera de tratar de entender las cosas y seguir adelante. Cuanto mayor era la diferencia entre lo que sentí y lo que me permitía pensar, más importante se iba haciendo el luchar con las palabras y capturar lo que no se dejaba atrapar.

Noche tras noche, sentada en mi sofá rojo, una vez que la vida se había calmado a mi alrededor, me quedaba mirando fijamente la farola de la calle enmarcada por las desnudas ramas del sauce, siguiendo la caída de los copos de nieve que revoloteaban y parecían no querer cesar nunca. Jamás ha nevado tanto como en el invierno de 1975-76.

La mayor parte de mi obra ha girado en torno a las relaciones entre dos personas que están (demasiado) cerca una de otra, entre dos seres que dicen que se aman.

Intenté ponerle un cerco al amor. Qué es o, al menos, qué no es para mí el amor. El libro trata también de la fortaleza y la debilidad, de la libertad y la dependencia, de necesitar y ser necesitado. No de "falta de amor sino de desesperación de amor", como dicen dos de las líneas centrales de lo que mucho más tarde sería un libro.

Anteriormente había disfrazado mis pensamientos sobre el amor bajo diferentes apariencias. En los poemas de La historia de amor del siglo no me he disfrazado en absoluto. Los escribí porque no pude dejar de hacerlo. Los escribí para poder creer, para tener la fuerza de creer que el amor existe a pesar de todo.

Nadie iba a leer jamás lo que estaba escribiendo.

Fue una casualidad que me animasen a publicar una selección de los textos. Una tarde me los puse debajo del brazo y se los leí a unas personas que no conocía y que no me conocían, gentes a las que nunca más iba a volver a ver. Aquella noche regresé a casa trastornada. Comprendí con toda claridad lo que de alguna manera había sabido desde el principio: que estos problemas no eran solamente míos, que eran los problemas de otras muchas personas. Luego se publicó el libro.

Todavía me sigue pareciendo casi incomprensible que justamente estos poemas que eran sólo míos hayan obtenido una acogida tan favorable. Han sido traducidos y se han publicado en muchos idiomas, se han leído por la radio, se han representado en teatro y en televisión en muchos países y yo he encontrado muchas personas en lugares distantes con las que he tenido la oportunidad de discutir los temas en torno a los que giran los poemas.

¿Qué es amor? ¿Cómo vivir unos con otros?

Porque sin el otro, nosotros no queremos ni podemos vivir.

A veces uno se ve obligado a luchar por su amor, sea lo que sea. Es lo que yo he hecho con estos poemas.

En la desesperación del amor."

F. J. Uriz



Al PRINCIPIO se tiene una sensación agradable

francamente vertiginosa e incomprensiblemente

maravillosa

de que a pesar de todo también hay gentes que ven

detrás de la fachada

que saben

y se dan cuenta

Pero después todo se vuelve

todavía más difícil

Luego viene la pregunta:

¿Por qué no te vas?

Infinidad de veces he estado a punto

de marcharme

si este período no es

el último

entonces me voy

si los que van a pagar el pato

son los niños

entonces me voy

si además empieza

a mentir

entonces me voy

y si alguna vez me pone la mano encima

a mí

entonces me voy

cuando los niños

ya no puedan más

entonces sí que tengo que irme

Y todo eso pasó

Sin embargo no me fui

¿Por qué?




UNA VEZ te desperté

en mitad de la noche

y te pedí

que me abrazases

cuando ya no me atrevía

a confiar en mí misma

–Trata de dormir

me dijiste dándote

media vuelta­­

Te volví a despertar

No me atreví a no hacerlo

Te incorporaste

y me miraste

luego desapareciste

en el blanquecino amanecer del cuarto de estar

Llevabas un vaso de whisky

a medio beber

en la mano

cuando volviste

–Joder

esto de que yo no pueda ser débil nunca

me dijiste

Luego te lo bebiste

Luego te acostaste

Luego te dormiste

Del camino del amanecer

hasta la mañana

no hay nada

que decir

De ti y de mí

tampoco hay

mucho más

que decir




EN PLENO CENTRO de unas bajas presiones

pertinaces lluvias por todos lados

las nubes de tormenta se amontonan más allá del bosque

la lluvia espera el momento de empezar a descargar

Como al principio de una borrachera

largos días húmedos por todos los lados

todavía puedes dormir cuando te quedas dormido

Nunca está nuestra casa tan calma

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gustaría comprar este libro, indicarme por favor cómo. Gracias.
Miraré a menudo esta entrada por si acaso me contestáis.Un saludo.

pirurzun@terra.es dijo...

Mira aquí:

http://www.iberlibro.com/servlet/SearchResults?an=Marta+Tikkanen&n=200000228&x=76&y=11

Anónimo dijo...

Muchas gracias.